viernes, 19 de noviembre de 2010

GH

Hoy me veo en la obligación de comentar lo que vi ayer en la tele. Nunca me he sentido enganchada a GH, antes, porque era casi vergonzoso decir que veías un cutre programa como ese y procuraba evitarlo, y ahora, que me importa poco lo que opinen otros, porque simplemente no me apasiona. Casi todos los personajes que desfilan me parecen de ficción, tan alejados de mí y de la gente de mi entorno que no consigo ni congeniar ni odiar a ninguno de ellos lo suficiente como para seguir el programa semana tras semana.
Sin embargo ayer me quedé dormida delante de la tele, no sé qué hora era pero creo que me lo vi casi enterito o al menos, lo suficiente. Se me quedaron especialmente grabadas en la retina montón de tías rubias florero intentando bajarse las mini-minifaldas y subirse los maxi-escotes, mientras luchaban por mantenerse encima de unos tacones de vértigo a la vez que daban saltos, palmaditas y grititos. No coment.

Lo que sí necesito denunciar porque me indignó es el vergonzoso y cruel comportamiento de una de ellas, una tal Laura. Esta niñata parece ser que se quedó pillada de un niño monísimo, Marcelo, que después de unos iniciales flirteos ha decidido pasar de ella. La tía tiene tal mosqueo encima, siente tan herido su orgullo que no le deja en paz, no deja de gritarle, de provocarle para que salte, mientras el chico intenta mantener la boca callada ( lo cual hace que “la Laura” se encienda todavía más). Me parece que lo que ví yo ayer era violencia sicológica en toda regla, exactamente igual a la que ejercen con mucha frecuencia hombres sobre mujeres. Para mí, el acoso que ese chaval está sufriendo ( salvo que sea sólo una estrategia de ambos) es claramente denunciable. Si esa actitud violenta, agresiva, fuera de un hombre hacia una mujer estaría todo el mundo poniéndole a parir y acusándole de chulo, pero como se trata de una chica parece que todo se resuelve con “Es una histérica” ( falta añadir, “como todas”). Sé que el programa éste busca la polémica y los malos rollos, y en eso está básicamente su éxito pero creo, seriamente, que en este caso se pasan, se aprovechan del sufrimiento de un chaval obligado a convivir con una tarada agresiva. Estamos hablando todos los días del bullying, del mobbing y de todas la variantes del acoso y de la intimidación y este programa se permite retransmitirlo en vivo y en directo sin hacer ninguna valoración ni condena de ello.

Eso sí, confieso que el jueves que viene estaré delante de la tele como un clavo para ver si echan o no a esta indeseable.

3 comentarios:

  1. Yo pregunto: Si una persona o persono (mayor de edad) es agredido públicamente pero no lo denuncia o incluso le mola, qué pasa? Le quitan puntos al agresor?

    PD: El niño no es tan mono

    ResponderEliminar
  2. Dentro de la tele no sé como funciona, pero fuera, te diría que la mayoría no denuncia a su agresor( a veces porque no se atreven, otras porque no pueden o otras porque sienten que esa es una forma de ser querido) pero eso no cambia la realidad, uno agrede y otro es agredido y la víctima es éste último.

    ResponderEliminar